Si hubiera que pintar el cuadro de esta campaña, las imágenes de primer plano podrían ser distintas: la crisis, los EREs, los recortes, el miedo,... Desde ayer el fondo de esa pintura tiene a trabajadores con pancartas, porque se anunció para cuatro días después de las elecciones una huelga general y como España aún no es Grecia, el anuncio de una huelga general marcará estos próximos días.
El fondo: la huelga general
Lo sabía hasta Mariano Rajoy: la reforma laboral costaría una huelga general. Aparte de que esté completamente justificada, lo que aquí nos interesa es su influencia en las elecciones andaluzas y en eso no está la cosa demasiado clara. Es evidente que movilizará a los trabajadores de izquierdas (sí, hay trabajadores de derechas o, al menos eso dicen los resultados electorales). Podremos ver, incluso, en las movilizaciones del domingo a dirigentes socialistas cerca de las pancartas. Sin embargo, en el otro lado del platillo nos encontramos con que los trabajadores en la calle también movilizan a los que no quieren huelgas. Y, por supuesto, que habrá gente que no olvide que hace poco más de un año hubo otra huelga general porque el Gobierno de ZP hizo otra reforma laboral.
Luis Barbero Foto de Elpais.com |
Lo decía ayer Luis Barbero en El País: estas elecciones son EREs contra recortes. El PSOE lo fía todo a los recortes de Rajoy y de otras CC.AA. Arenas no pasa de hablar de paro y corrupción recordando los mejores tiempos del discurso aznarista antes de llegar a La Moncloa. Si miramos los programas nos podemos echar a llorar. El del PP parte de la reducción de impuestos generalizada, algo que, dadas las circunstancias parece un brindis al sol, por no decir algo peor. El del PSOE se basa en la continuidad sin ninguna propuesta interesante. Así que ya saben, o votan contra los recortes o votan contra la corrupción. O visto desde la otra perspectiva. O votan por los recortes o votan por la corrupción.
Sánchez Gordillo en foto de wikipedia |
Sánchez Gordillo dice que no se puede pactar con el diablo porque se acaba en el infierno. Lo malo que considera el diablo tanto al PP como al PSOE y, si las urnas no dan mayoría absoluta de los populares, la coalición cuyas listas en Sevilla encabeza Sánchez Gordillo, tendrá que decantarse. Podrá votar al PSOE y darle el gobierno o podrá no votar al PSOE y darle el gobierno al PP. Haga lo que haga, acabará en el infierno. Tendrán que explicar muy bien lo que decidan y, en algunos casos, será inexplicable.
En la esquina: una reja y una manta
La juez Alaya en foto de lavozdigital.com |
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